El mejor regalo que podemos darnos.
Estamos de lleno en la época en la que pensamos en convivios, comida y regalos. Vemos personas reunidas, sonriendo, abrazadas, agradecidas y felices. Pero si observamos con atención, también hay algo más.
¿Sabía que en diciembre aumentan las llamadas a los servicios de atención psicológica? Y es que hay algo que no se muestra detrás de las “selfies” con adornos navideños, las fotos de regalos o de cenas familiares o con amigos. En la clínica escuchamos acerca de los síntomas depresivos, la ansiedad por el endeudamiento y el aumento de conflictos y discusiones que suman un profundo estado de soledad.
La naturaleza del ser humano es la conexión. Sentirnos conectados con otras personas, con un poder superior, con la naturaleza, o con nosotros mismos, son necesidades básicas. Sin conexión perdemos la capacidad de sentir placer y encontrarle sentido a las cosas de la vida.
Así que en esta época lo que les deseo, es poder experimentar un profundo y delicioso estado de conexión. Para cultivarlo les recomiendo algunas prácticas y reflexiones para Regresar a su centro.
Lo primero que recomiendo es tomar una pausa y hacer una lista con todas las reuniones, tareas, compras, y compromisos que tenemos. Incluya las cosas a las que se siente presionado o que “debería” cumplir. Hacer esto puede sentirse abrumador, pero es importante poder ponerlas en papel y sacarlas de nuestra cabeza por un momento.
Cuando ya la tengan escrita, ahora pueden ir observando, con calma y claridad. Ordene el listado según 4 columnas: Absolutamente necesarios, Prioritarios, Genuinos Deseos y Liberar.
Los que son absolutamente necesarios son cosas que solo usted puede hacer y que no hacerlos tiene un impacto negativo. Si alguien más podría realizarlo, considere pedirles ayuda. Cuando pedimos ayuda, estamos permitiendo que las personas alrededor nuestro sientan reconocimiento por sus capacidades y el impacto que tienen en nuestra vida.
Hay una frase que me ayuda muchísimo a tomar decisiones: “Cuando las prioridades están claras, las elecciones se hacen fáciles.” Analice cuáles son sus prioridades y en base a eso podrá filtrar si esos compromisos son importantes o no.
Nuestra vida es auténtica, y nos genera verdadero placer, cuando tenemos la capacidad de escuchar y atender a nuestros genuinos deseos. Si es algo que en ese momento siente nacer en usted la intención pura de hacer algo, en especial cuando sea algo sencillo o pequeño, verá que el escucharlo y hacerlo le dejará lleno de satisfacción.
Todo lo de ese listado que no haya quedado en las categorías anteriores va a Liberar. Son compromisos que no son necesarios ni prioritarios y genuinos. El reto, es que dejarlos ir, puede despertar un poco de culpa o nos puede hacer cuestionarnos lo que las otras personas puedan opinar. Pero usualmente son estos elementos los que están sobre cargándonos y desgastando nuestra energía.
Tomar responsabilidad de nuestro bienestar emocional y mental es lo mejor que podemos hacer por las personas que amamos. Les deseo salud y paz.